Acompañado de buena parte de su gabinete, el alcalde de Riohacha, Genaro Redondo Choles, llegó hasta la calle 27 del barrio La Loma, donde las lluvias recientes dejaron una nueva escena de inundación. El mandatario se reunió con líderes y vecinos para escuchar sus preocupaciones y revisar de primera mano la magnitud del problema que afecta a este sector desde hace más de una década.
La calle 27 conecta la avenida Francisco El Hombre con la del Aeropuerto, y cada vez que llueve se convierte en un punto crítico por el represamiento de aguas lluvias. Redondo Choles explicó que es necesario realizar estudios técnicos que permitan definir la inversión requerida para una solución definitiva, ya que el problema no es reciente, sino estructural.
“Una batea sin salida”
Durante el diálogo con la comunidad, se recordó que el pavimento de la zona fue construido durante el primer gobierno de Jorge Pérez Bernier, dentro de un programa de pavimentos comunitarios ejecutado sin estudios técnicos ni una planeación adecuada. Aunque en su momento la obra fue bien recibida por los vecinos, hoy se ha convertido en un problema, dejando el sector como una especie de ‘batea’ que retiene grandes volúmenes de agua e impide su evacuación rápida.
A la falta de planeación se suma otro factor: el mal manejo de basuras por parte de algunos habitantes. “La gente cuelga las bolsas de basura en la corriente del agua, no barren sus frentes ni recogen las hojas de los árboles. Eso genera taponamientos en los manjoles”, explicó Redondo Choles, quien pidió más conciencia ciudadana en época invernal.
Propuesta técnica y compromiso social
El alcalde explicó que la secretaría de Obras y Planeación estudia la instalación de un sistema de bombeo que impulse las aguas hacia otro punto de la ciudad. “Aquí toca hacer una barcaza o estación de bombeo para trasladar rápidamente el agua. En condiciones normales no hay forma de que salga sola”, señaló, al destacar que, tras 24 horas de lluvias moderadas, el drenaje fue total, lo que evidencia que el sistema aún responde parcialmente.
Redondo Choles aprovechó el encuentro para hacer un llamado a la comunidad sobre la gestión de residuos sólidos: “Cuando sacamos la basura durante la lluvia, esta termina en los canales, obstruye las rejillas y provoca inundaciones. Todos debemos hacer nuestra parte”, enfatizó.
Una deuda histórica con el sector
Los vecinos recordaron que este problema tiene más de 13 años y que en varias ocasiones solicitaron la intervención de la Defensoría del Pueblo. Algunos líderes pidieron que el Gobierno Nacional también se vincule al proyecto para garantizar una inversión estructural. “Aquí hemos vivido con este problema por años. Lo que pedimos es que esta administración sí le dé una solución definitiva”, expresó uno de los asistentes.
El alcalde cerró la reunión diciendo a convertir las quejas en acciones. “No vinimos a revisar los problemas, sino a construir soluciones. Ya sabemos qué hay que hacer: el estudio, el diseño y el proyecto que permita sacar el agua de aquí para siempre”, concluyó Redondo Choles, ante la expectativa de una comunidad que espera dejar atrás sus días de inundaciones.