“Hemos estado muy pendientes a la ejecución de la carretera La Florida a Cuestecitas y según los informes que se me han entregado por parte del contratante, ya se pasaron las primeras actas y dice el secretario de obras que todo va por buen camino y espera que en la semana próxima deben continuar los trabajos en la arteria vial que comunica parte del norte y sur de La Guajira y Cesar”.
Indicó que están pendientes de los pagos que corresponden a la adición que se hizo al contrato para la Unión Temporal, cuando se autorizó el reinicio de la obra. El gobernador indicó estaba muy pendiente de vigilar para que los recursos públicos se puedan invertir de manera idónea.
El mandatario del departamento dijo que está muy pendiente, porque no es justo que se continúe con problemas en la construcción de una obra vial donde cerca de 300 personas han perdido la vida por las pésimas condiciones de la carretera. “Son 300 familias a las que hemos visto sufrir inmensamente por la pérdida de uno de sus seres queridos, y eso es lo que me anima a no tener temor si de pronto he sido muy reiterativo en esta materia, pero le dijo a los guajiros que voy a ser muy vigilante para que esos recursos que proceden del Ocad Caribe, se ejecuten bien y el contrato que se tiene con Albania sea bien vigilado por todos, especialmente por la secretaria de Obras de esa localidad”, explicó Aguilar Deluque.
En el mes de febrero de 2022, cuando arrancó el proceso, se hizo con un contrato de 83.707 millones de pesos y la energía o dinámica que tenía la obra dejaba observar que había muchas ganas de terminar más pronto que tarde, pero los meses y años dijeron algo diferente: paralizada por muchos meses y al parecer no había posibilidad de continuar y apenas se observaban tres o cinco obreros en la vía y la mayor acción era para regar la vía descapotada que terminó convertida en la mayor fuente de contaminación de la región, después de la que se produce en los grandes complejos mineros de carbón.
El gobernador Jairo Aguilar llegó al cargo con el ánimo de rescatar las obras paralizadas o semiparalizadas o elefantes blancos como el mismo los ha llamado y ya tiene mucho que mostrar, pues la obra fue inyectada financieramente con una adición cercana a los 30.000 millones y tiene la intención de permanecer muy cerca de la obra para no generar más frustraciones en la comunidad que ha llorado mucho por más de 300 muertos que deja el pésimo estado del tramo vial de 33 kilómetros y que cuando arrancó el contrato tuvo un plazo para entregar de un año en 2022.