Más de 700 indígenas wayuu en el municipio de Manaure están siendo beneficiados con una jornada especial de identificación organizada por la Registraduría Nacional y Misión La Guajira. La actividad busca garantizar el acceso a documentos como registro civil, tarjetas de identidad y cédulas de ciudadanía, facilitando su inclusión en los servicios del Estado.
La jornada está liderada por el registrador nacional, Hernán Penagos, y María Camila Muñoz, gerente de Misión La Guajira. Esta iniciativa se lleva a cabo en la institución etnoeducativa San Rafael del Pájaro, sede Calabacito, y busca atender especialmente a la comunidad de Calabacito, en el corregimiento El Pájaro.
“La unión de esfuerzos nos permite acercar nuestros servicios a niños, niñas, adolescentes y adultos mayores del pueblo wayuu. Con su identificación, esta población podrá acceder a derechos fundamentales y servicios sociales”, explicó Penagos.
Además de Manaure, la Registraduría y Misión La Guajira han realizado jornadas en otros municipios. En Maicao, por ejemplo, se tramitaron 421 documentos en solo dos días, beneficiando a decenas de familias en el corregimiento Carraipía. La meta es extender estas iniciativas a Uribia y otras comunidades apartadas.
“La Registraduría Nacional comenzará con estas jornadas para llegar a los lugares más alejados del país y garantizar el derecho a la identidad”, afirmaron desde la entidad.
Desde su llegada en diciembre de 2023, Misión La Guajira ha beneficiado a más de 17.000 personas en 75 comunidades, brindando soluciones en acceso a agua potable, energía y seguridad alimentaria.
Hasta la fecha, han recuperado 27 pozos, perforados dos nuevos y construidas siete plantas potabilizadoras que funcionan con energía solar. También han instalado sistemas de energía en 60 puntos clave y llevado internet a varias comunidades, en alianza con Claro Colombia.
Uno de sus proyectos más recientes fue la entrega de una infraestructura educativa en la comunidad de Kaikashi, en Manaure. Además, en esta zona se recuperó un pozo de agua, se instaló una planta potabilizadora y se implementaron paneles solares, mejorando así la calidad de vida de las familias.
Gracias a estas acciones, muchas comunidades wayuu han obtenido acceso a agua potable, energía y huertas comunitarias, lo que les permite mejorar su calidad de vida. El objetivo es continuar impactando a más personas, llegando a 25.000 habitantes en 81 comunidades.